El pasado sbado unos amigos le organizaban a su hija una fiesta sorpresa por su 18 cumpleaños, Marina que es como se llama la cumpleañera no tenia ni idea de la sorpresa que le esperaba.
Cuando llego estaba muerta de la vergüenza, pero creo que en el fondo a todos nos gusta que nos den una sorpresa así.
Su papa me encargo que le hiciera la tarta, y la única pista que me dio, fue que le gustaba mucho el verde...verde es un color poco comestible si hablamos de Tartas.....pensé yo, así que durante la semana se me iban ocurriendo cosas y este fue el resultado.
Creo que a Marina le gusto, y eso es lo importante¡¡¡¡¡
Como esa semana había estado asistiendo a un curso de galletas decoradas, pensé hacerle galletas a juego con la tarta para darlas a las invitadas, no quedaron perfectas, pero espero mejorarlas con mucha practica.
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